Día gris, con llovizna y nubes sobre Viena.Fuimos a la estación de trenes a sacar el boleto para Praga y mirando los carteles luminosos, nos subimos a un tren "de cercanías",y bajo dos paragüas, recorrimos un poquito de Baden.Nos recibió con sus casas señoriales y con esas flores preciosas que adornaban sus calles.
Aquí,el lunes posterior al domingo de Pascua es feriado, los comercios están cerrados y en la gris y tranquila siesta ,Baden parecía una distinguida ciudad fantasma.
Tomamos un cafecito con una torta exquisita y lo volvía a" asaltar" a Julito.
Este era el café, calentito y acogedor, con hombres charlando y tomando cerveza.
Así era el tren en el que fuimos ¡parecía un avión!.A la vuelta, para ver más el paisaje nos volvimos en tranvía ¡increíble!,se desplaza por el medio del campo ¡nos encantó el viajecito!
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Que hermoso viaje me encanta como lo cuentan y cuanto lo disfrutan los quiero mucho!!
ResponderEliminarCuídense mucho les mando miles de besos y Javi también.
Romi