A sólo 30 km de Lisboa se encuentra Sintra,una pequeña ciudad,enclavada dentro de un paraje boscoso y verde,construida entre los cerros,la habitan, en su casco histórico 30.000 habitantes.
Su origen es celta,fue dominada por los árabes y cristiana desde que alfonso I de Portugal venciera al Tarifa de Badajoz en el 1154.
Comenzamos a caminar sus empinadas callecitas y desde lejos se recortaban contra el cielo estas dos extrañas torres cónicas de 33 metros de altura que pertenecen al Palacio Nacional ,son un ícono de Sintra y en realidad su significado es bien terrenal,son las chimeneas de la cocina del palacio.
No sólo el palacio aparecía y desaparecía entre el follaje,también las casas adornaban esta sierra de Sintra.
¡¡Al fin llegamos!El edificio es un claro ejemplo de palacio medieval portugués y se encuentra en pleno centro histórico.
Adentrarnos en sus escaleras de piedra,en sus salones, en sus corredores, fue como volver a ese pasado lejano y rico en leyendas.
El rey Joao I y posteriormente el monarca Don Manuel I le dieron vida a estas paredes.Sólo les enseñamos esta pequeña muestra de las bellezas que encierra el palacio.Observen el artesonado del techo es MARAVILLOSO.
Mientras subíamos escaleras y escaleritas,por las ventanas íbamos observando detalles y perspectivas que de abajo no se aprecian.
Y así llegamos a la cocina,con sus ollas de cobre, sus hornos y por supuesto el interior de las famosas chimeneas.
Y nos encaminamos hacia otro palacio,pero se lo enseñaremos mañana.
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